A los 23 años llega Yenny al Hospital Puerto Montt en enero de 1981. Ella comenzó a trabajar como reemplazo de 15 días, lo que se transformó en una carrera de 42 años. Yenny es oriunda de Puerto Montt, casada con su Manolo, Don Manuel González, tiene tres hijos y dos hermosos nietos.

Realizó en un comienzo funciones administrativas en la Oficina de Informaciones y luego en el antiguo SOME, paso por Medicina donde recuerda que su Jefatura fue el Dr. Felipe Del Campo.

Luego fue contratada en el Consultorio Antonio Varas donde se desempeñó como secretaria por tres meses posterior a los cuales retorno al HPM, “necesitaban una administrativa ágil en dactilografía y me trajeron a Rayos en el Hospital, igual me fui un poco triste del Consultorio porque quería mucho al equipo; y luego empecé en Rayos con mi jefa, la Dra. Kaliopy Traub Kipreos, el Dr. Sepúlveda y dos tecnólogos Luis Silva y Ana María Leiva junto a 4 Técnicos Paramédicos de los cuales la Sra. Patricia Toledo todavía es funcionaria de HPM, y sigue trabajando en Rayos”.

Diez años después se traslada a Traumatología donde conoció un nuevo equipo liderado por el Dr. Roberto Osses Borquez. 10 años después la trasladan a Pabellón de Especialidades, señala “aquí mis jefes fueron el Dr. Alejandro Caroca y el Dr. Arturo Vargas, fue una experiencia enriquecedora, ya que era secretaria de un gran equipo de funcionarias(os). En pabellón de Especialidades estaba Cirugía Infantil, Otorrino, Maxilo facial, Urología y oftalmología”.

Entre los años 1999 y 2000 comenzó su carrera como dirigente sindical, iniciativa que nace cuando comienza a trabajar como apoderada del jardín, donde fue presidenta del centro de padres, comenta la funcionaria, “es así como me fui haciendo conocida y logre tener el apoyo de los funcionarios para ser dirigente de base, luego Regional y posteriormente llegar a ser Dirigente Nacional de la Fenats Unitaria”.

El 2011 asume el cargo de jefa de Lavandería donde primero se inició como secretaria administrativa para luego asumir el cargo directivo, cargo en el que llevaba más de 12 años, lavandería que contaba con 13 funcionarios.

Para ella estar a cargo de la lavandería fue un desafío bien grande, “trabajé con Rodrigo Aguilar y luego mi jefa fue Marisol Ojeda, donde pasamos buenos momentos y otros no tan buenos como el episodio trágico cuando hubo un incendio en nuestra lavandería, y posterior a esto, aceptamos el gran desafío de la puesta en marcha de este hermoso hospital. Agradezco también al Dr. Rafael Merino y la Dra. Miriam Muñoz por la confianza y el apoyo para contar con la moderna Lavandería HPM”.

Con lágrimas durante la entrevista habla de sus grandes amores: “Mi familia, mi lavandería, mi hospital y mi gremio. Tengo la dicha de tener tres hijos maravillosos, mi hija mayor (Alejandra Carola) es funcionaria pública del Servicio de Salud del Reloncaví, muy comprometida con su trabajo y su vida personal, mi segunda hija (Yenny Camila) está ad portas de terminar su carrera de Veterinaria y mi hijo menor (Mauricio Antonio), cursando la carrera de Ingeniero Civil Industrial”. Y menciona además a sus nuevos amores los nietos: Federico de 5 años y Maximiliano de 2 años.

En la unidad de Lavandería trabajan en la actualidad 23 funcionarios, entre auxiliares como administrativos su función entregar ropa limpia para 52 servicios clínicos.

“Somos un equipo unido, hemos tenido muchas alegrías en todo el tiempo que hemos estado juntos, también tristezas como fue la perdida de uno de los nuestros, Sergio Ojeda. Además, tenemos un equipo de costura siempre preocupado por mejorar prendas y confeccionar para los pacientes si es necesario, tengo excelente costureras”.

Finalmente afirma, “tengo mucho cariño por toda la gente con la que durante estos años he compartido, no guardo rencor por nadie, aunque sabemos que no somos del agrado de todos”

A las nuevas generaciones les recomienda, “ser comprometidos, adaptarse a los cambios, que entiendan que estar en este lugar es para servir a quienes los necesitan”.

Agrega, “espero que todos los funcionarios quieran de verdad al hospital y a sus Servicios, porque trabajando con compromiso y dedicación las cosas se vuelven más positivas y sobre todo trabajar en equipo porque todos somos importantes”.

Finalmente dice: “me voy feliz y orgullosa a esta nueva etapa de mi vida, atesorando cada momento vivido y cada lección aprendida en estos 42 años en mi querido Hospital Puerto Montt, los llevaré siempre en mi corazón, muchas gracias”.