Hace justamente dos años, en octubre de 2021, entró en vigor en Chile la ley que reconoce, protege y regula, sin discriminación alguna, el derecho de las personas que padecen una enfermedad terminal o grave a una atención de salud digna y que evite sufrimientos en esta etapa, objetivo que cumple a cabalidad el Equipo de Cuidados Paliativos del Hospital Puerto Montt, el que atiende mensualmente a cientos de pacientes y a sus familias.
Desde el funcionario que atiende al paciente en ventanilla, pasando por psicólogos, trabajadores sociales, kinesiólogos, enfermeros, profesionales tens y personal médico de esta unidad se encuentran abocados a entregar una atención integral tanto clínica como de acompañamiento a quienes no se les puede brindar un tratamiento curativo, sino de alivio, tanto físico como mental para enfrentar la inevitable muerte.
“Habitualmente, los médicos somos formados para curar enfermades, sin embargo, nos enfrentamos a patologías avanzadas, progresivas, irreversibles, que causan sufrimiento a los pacientes y a sus familias. Como médicos debemos hacer mucho más que tratar: generalmente lo que hacemos es aliviar esos síntomas y cuando no se puede es muy importante el acompañamiento del equipo completo para que los pacientes puedan sobrellevar de mejor forma este difícil proceso”, precisó el Dr. Rómulo Álvarez, médico de la Unidad de Cuidados Paliativos HPM.
Más de mil pacientes mensuales son atendidos en la Unidad, principalmente afectados por etapas avanzadas de cáncer, quienes, además de recibir tratamiento farmacológico de alivio para el dolor, obtienen acompañamiento psicosocial el que “adquiere un papel relevante en la relación con el paciente y familia, tanto en los cuidados, educación sobre la enfermedad, contención y apoyo en el sufrimiento”, señaló Marie Claire Dumay, psicóloga de Cuidados Paliativos oncológicos del Hospital Puerto Montt.
La profesional detalló que cada atención que reciben los pacientes y sus familias se realizan de forma personalizada ya que “cada experiencia es única e irrepetible, cada historia, cada proceso es, sin duda, un camino lleno de dolor y aprendizaje. Hablamos que la muerte no debe ser un tabú, aunque se haga todo lo necesario para prolongar la vida y permitirle a la persona que tenga todo el tiempo posible para concretar sus deseos o necesidades”.
A la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital Puerto Montt ingresan de dos a tres pacientes nuevos diariamente, número que podría ser más elevado si es que fuesen derivados antes por sus médicos tratantes. “En la medida en que se difunda qué son los cuidados paliativos, aumentará la pesquisa de pacientes, los que muchas veces son invisibilizados por la sociedad, e inclusive por los profesionales de la salud, ya que no son derivados a tiempo”, aseguró el Dr. Álvarez.
Sin embargo, el médico indicó que gracias a la aprobación de la Ley de Cuidados Paliativos Universales “garantiza que nuevos profesionales se adhieran a estas unidades ya formadas, y dentro de los requisitos que aparecen en la ley, se solicita a los centros formadores que incluyan dentro de sus mallas curriculares la formación en cuidados paliativos, es así, que esto no es sólo para el área médica, sino para todos los profesionales que trabajan en el sector salud”.
Tanto el Dr. Álvarez como la psicóloga Marie Claire Dumay concuerdan en que la principal recomendación para familias, cuidadores y médico tratantes es escuchar a los pacientes y atender a sus necesidades de cuidados paliativos cuando lo requieran, ya que debido principalmente al tabú que aún ronda en el concepto de la muerte provoca que “el trato que le damos a los pacientes se deshumanice y finalmente se comience a lidiar con un paciente con cáncer, más que un paciente que tiene un nombre y un apellido”.
“Muchas veces en la familia se le niega al paciente hablar de su propia muerte porque es un tema que no hay que tocar, o simplemente porque si se habla de la muerte nos ponemos tristes y la enfermedad puede avanzar. Sin embargo, eso no es lo que nosotros queremos, entendemos que es un proceso difícil y le pedimos a las familias que cuenten con nosotros y pidan la ayuda que necesitan en el momento en que ellos deseen”, sentenció el Dr. Álvarez.
Los cuidados paliativos y los tratamientos para el dolor de enfermedades terminales están garantizadas en su atención y aplicación por las Garantías Explicitas en Salud (GES4) y la derivación a dicha unidad del Hospital Puerto Montt puede venir desde cualquier nivel, tanto de la atención primaria como desde otras unidades dentro del HPM. “Si el paciente cumple los criterios de ingreso, lo hacen sin ningún problema, está definido y es de conocimiento médico, entonces esperamos que cuando esto se comience a masificar haya más conocimiento en el área de la salud para que las derivaciones sean más expeditas y oportunas”, concluyó el Dr. Álvarez.