María José González jamás pensó que a sus 36 años iba a padecer esta enfermedad, sin embargo, las alarmas se encendieron al ver sangre en sus deposiciones, señal inequívoca de que algo no era normal. Al poco tiempo sería diagnosticada con Cáncer de Colon, patología que no presenta síntomas en sus etapas iniciales y que producto de la pandemia el diagnóstico se ha retrasado en Chile.

“Para mí al principio fue muy doloroso porque no sabía lo que tenía o si había tratamiento. Pero me han tocado muy buenos médicos, que tienen voluntad de explicarte bien las cosas. Con ellos me empecé a sentir más cómoda y empecé a subir mi ánimo, pero nunca pensé que a mi edad iba a tener esta enfermedad”, indicó María José, quien actualmente es paciente del Hospital Puerto Montt.

Lamentablemente este tipo de cáncer, como muchos otros, ha tenido un aumento entre la población adulta-joven del país producto de un estilo de vida acelerado y malos hábitos alimenticios, además de la falta de diagnósticos oportunos de acuerdo a lo que señaló el coloproctólogo del Hospital Puerto Montt, el Dr. Tomás Contreras.

“Actualmente, no hay un registro fidedigno a nivel nacional. Lo que sí sabemos es que la consulta normalmente en el cáncer colorrectal suele ser más bien tardía, ya que los síntomas no aparecen en etapas precoces. Por la pandemia, esto se ha ido retrasando aún más y eso se ha visto reflejado en un mayor aumento de pacientes que consultan en urgencias cuando hay un tumor en etapas más avanzadas”, precisó el profesional.

“Tuve sesiones de radioterapia. Igual te deja decaído, al término de las sesiones yo quedaba muy mal. Con fatiga, cansancio. Pero al pasar los días, me he iba recuperando.  Luego de eso tuve mis quimioterapias y me operaron en febrero del año 2021. Gracias a Dios quedé bien y fue sólo porque me diagnosticaron a tiempo”, detalló la paciente.

Hecho que recalcó el Dr. Contreras ya que “si bien es un cáncer silencioso en etapas precoces, sabemos que en etapas iniciales tiene una tasa de curación muy alta. En etapas más avanzadas, normalmente igual existe algún tipo de tratamiento y hay pacientes que incluso logran curarse. Son los menos, y por eso el ideal es poder diagnosticar de forma precoz, ojalá en las etapas iniciales”.

Los cambios de hábitos de los chilenos en los últimos 20 años, al alcanzar estilos de vida similares a los países industrializados, han hecho que el cáncer colorrectal, entre otros, se hayan incrementado. Factores genéticos, tabaquismo, edad avanzada, consumo de alcohol en grandes cantidades y la alta ingesta de carnes rojas procesadas inciden en gran proporción al desarrollo de estas enfermedades.

“La principal recomendación es controlar los factores de riesgo. Tener una dieta rica en fibra, tratar de no consumir carnes rojas en altas cantidades. Evitar el tabaquismo que además nos permitirá disminuir el riesgo otros tipos de cáncer. El consumo excesivo de alcohol tampoco nos va a favorecer y en general tener una vida ojalá lo más activa posible”, aseguró el Dr. Contreras.

El profesional además instó a la comunidad a asistir a controles rutinarios a contar de los 45 años, para evitar casos como el de María José, quien además de agradecer al Equipo de Oncología del Hospital Puerto Montt, aseguró que el apoyo de sus seres queridos y asistencia psicológica fue fundamental para enfrentar el proceso de recuperación. 

“El apoyo fundamental de la familia me ayudó a enfocarme en mi recuperación. Sin el apoyo de la familia uno no sale adelante y ojalá todos pudieran contar con ese apoyo el de una psicóloga, como lo tuve yo, o de un hermano o de una tía. Al principio veía todo negro, pero gracias a Dios, con el apoyo de todos, salí adelante”, concluyó.

El pasado 31 de marzo se conmemoró en el mundo el Día contra el Cáncer de Colon y Recto, jornada que llama a la concientización de este tipo de enfermedad. Diariamente son diagnosticadas 16 personas en todo Chile y sólo en 2018 fueron diagnosticadas 5.915 pacientes con esta patología, según cifras de la Universidad Católica.